Conocido como el mejor mimo del mundo, Marcel Marceau recorrió el mundo mostrando el arte del silencio, logrando ir más allá de la palabra con cada gesto que expresaba en sus presentaciones.
Inspirando sus comienzos en Charles Chaplin, Marceau (1923-2007) creó a Bip, su icónico personaje que subía a los escenarios a intentar cambiar el mundo de forma pasiva y reflexiva.
Ya ha pasado una década desde que el artista francés falleció y su sabiduría dentro y fuera de las tablas son el mayor legado que dejó. Pero un hecho valorable es que, si bien en su arte no emitía frase alguna, cada vez que hablaba con la prensa entregaba profundas reflexiones.
Ahora recordamos algunas de las mejores frases que dejó el mimo:
«El silencio es infinito como el movimiento, no tiene límites. Para mí, los límites los pone la palabra».
“Sin el amor, el ser humano no puede sentir la necesidad de crear. La base de la creación parte del amor, de la necesidad de amar, de compartir, de comunicar, y es por el amor que hemos creado el teatro”.
“Toda mi vida he luchado contra el horror de las guerras, de las injusticias, desde los escenarios del mundo”.
“El camino más corto que separa al sueño de la realidad es el arte”.
«La magia suscita la admiración: esa facultad que hace que podamos elevarnos por encima de nosotros mismos, a través del concepto de una hazaña que, racionalmente, parece imposible llegar a poder realizar».
“No me considero parte de la tercera edad (risas); al contrario, yo soy un niño, y así me siento cuando actúo. Pero sé que soy un mortal; no me olvido de ello”.
“Quiero morir de pie, en un escenario. ¿Por qué no he de hacerlo? Si tantas veces he muerto en el escenario y me he levantado para saludar al público”.
«Lo único que no pude expresar como mimo fue la mentira, porque para mentir sólo se necesita la palabra. Y estoy agradecido de que así sea”.
«El mimo hace visible lo invisible e invisible lo visible».
«Soy un testimonio de mi observación sobre la vida. En el fondo, Bip es como una enciclopedia sobre la historia de la humanidad que intento transmitir con este arte de mi cuerpo».